¿Qué hacer para confiar más en mí? 8 pasos para lograrlo

Definitivamente no hay nada que nos pueda hacer sentir más limitados que la falta de confianza en nosotros porque cada vez que queremos tomar una decisión o hacer algo nuevo, tenemos una voz critica dentro de nosotros que nos dice que no vamos a poder, que no somos lo suficientemente buenos, inteligentes, valientes o capaces para lograrlo.

Y, para avanzar, entonces necesitamos urgentemente la validación de nuestro entorno, que alguien nos sirva de guía, que alguien nos diga que sí es una buena idea o que sí podemos conseguirlo para poder, de alguna manera, intentar contrarrestar el poder tan grande que tiene esa voz negativa en nosotros.

¿Te identificas con esto?

¿Has estado en una situación familiar?

Si es así, confío en que estos 8 pasos te van a ayudar a aprender a confiar en ti misma.

Estos mismos pasos o herramientas me ayudaron mucho en mi vida personal y fueron la respuesta a la pregunta que me hice día tras día: ¿qué hacer para confiar más en mí?

En el pasado perdí mucho tiempo dudando de mí, de mis capacidades y de cada mínima decisión que iba a tomar, pero llegó un punto en donde decidí hacer algo al respecto porque me estaba haciendo desperdiciar mucho tiempo de mi vida, sentirme cada vez peor conmigo misma.

¡Y ni hablar de mi autoestima que cada vez se debilitaba más!

Yo llegué al punto en el que no quería tomar decisiones porque hacerlo me generaba ansiedad y sabía que la situación se estaba agravando cuando me costaba incluso algo tan simple como comprarme algo que ropa sin tener la aprobación de otra persona.

Necesitaba que alguien me dijera “sí, eso es lo correcto”, “eso está bien”, “te ves bien con eso” y eso estaba recayendo en mi familia, amigos y parejas.

Esas pequeñas cosas -no tan pequeñas- son las que nos dicen que estamos perdiendo el control de nuestra vida 

Y, a medida que vamos creciendo y necesitamos tomar decisiones mucho más trascendentales en nuestra vida, decisiones profesionales y personales, es vital ser capaces de confiar en nuestro criterio.

¿Cómo confiar más en mí?

Dudar y desconfiar de nuestro criterio no nos permite avanzar.

Estas 8 herramientas que comparto contigo hoy me han ayudado en mi historia personal pero también a mis clientes en todos los aspectos de su vida.

Y es que se trata de herramientas o pasos aparentemente sencillos que no solo aumenta la confianza en ti sino que ayudan a tener una visión más clara de cuál es el camino que debes recorrer para fortalecer tu seguridad, para tomar decisiones sabiendo que confías en tu criterio y para llegar a un punto donde no necesites o esperes la aprobación de otros para saber que has tomado la decisión correcta.

Porque sabemos que la aprobación y validación de nuestro entorno es siempre bien recibida, y nos va a sentar bien, pero cuando confiamos en nosotros mismos, cuando estamos seguros, la apreciamos pero no la necesitamos.

A veces te encuentras tan atrapado en ese círculo vicioso de depender de la aprobación de otra personas antes de dar un paso en tu vida, por pequeño que sea, que dejas que esas opiniones influyan a un punto donde quizá desistas de lo que querías hacer y eso no quiere decir que no estabas en lo correcto o que eso no era lo que debías hacer, sino de que le entregaste el poder decisión y el rumbo de tu vida a otra persona.

Esto es el resultado de que inconscientemente para ti importa más y pesa más esa aprobación ajena que sentir dentro de ti que eso es lo correcto, que eso es lo que tú quieres hacer.

Las posibilidades de lo que podemos lograr y a dónde podemos llegar cuando confiamos en nosotros mismos son infinitas, son demasiadas, y las cosas empiezan a cambiar cuando comienzas a creer en ti de verdad.

Debes cultivar ese hábito de confiar en ti.

Es una disciplina también y se empieza por lo que estás haciendo hoy: ir en búsqueda de las herramientas que te sirvan a ti y que seas capaz de ponerlas en práctica todos los días, cada vez que tu mente quiera convencerte de que no sabes lo que haces o que eso que estás planeando no va a funcionar.

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1. Toma en cuenta que todos tenemos inseguridades

Para mí, el paso principal para aprender a tener más confianza en sí misma es dejar de compararte.

Y es que tenemos la idea de que los demás tienen la vida resuelta y lo tienen todo súper claro, pero eso no es así.

Es importante dejar de ver a los demás como si ellos sí están seguros, como si ellos sí saben lo que están haciendo con su vida y nosotros somos los únicos que estamos perdidos en el campo porque todos tenemos inseguridades.

Es verdad que algunas personas tienen menos inseguridades que otras.

Sin embargo, lo que te ha diferenciado hasta ahora con personas con las que te comparas es que ellos son personas que, sin importar la cantidad de inseguridades que tengan, han decidido aprender a trabajarlas y a transformarlas.

No es necesariamente que esa persona que crees que tiene todo resuelto carezca de inseguridades sino que ha trabajado activamente en ellas.

Estoy segura que cuando aprendas a confiar más en ti, tú también serás capaz de desenvolverte muy bien y de proyectar esa seguridad y confianza que ves en esas personas que admiras.

2. Visualiza

¿Por qué es importante la visualización cuando se trata de ganar confianza y seguridad en ti misma?

Cuando nos visualizamos como lo que queremos ser o con lo que queremos tener o lograr, empezamos a creérnoslo.

Y es que la visualización es una herramienta poderosa que nos hace sentir que eso que queremos es posible y que somos capaces de construirlo nosotros mismos.

La visualización en sí misma es un ejercicio que nos sirve muchísimo para tener esa tranquilidad, esa paz que tanto queremos alcanzar cuando te atacan las dudas.

En este artículo podrás saber lo que dice la ciencia al respecto y cómo incluir la visualización en tu vida.

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3. Afírmate

La visualización es verte donde quieres estar, lo que quieres ser, saber que es posible eso que tanto quieres, mientras que las afirmaciones son el trabajo mas pequeño que se hace diariamente donde empiezas a saberte merecedora y a declarar cosas positivas e inspiradoras en tu vida.

¿Y esto qué tiene que ver con ganar más confianza en mí misma?

Recuerda que todo lo que te dices, todo lo que piensas, todo lo que está en tu mente todo el día tiene una influencia en ti y en el resultado de lo que ves en tu vida.

“Las afirmaciones son una herramienta poderosa para instalar de forma deliberada creencias que deseas sobre ti mismo”.

Siento que esta cita de Nikki Carnevale resume muy bien de qué se trata esta técnica y cómo nos puede ayudar a confiar más en nosotros mismos.

Las afirmaciones pueden ser más efectivas si se dicen en voz alta, de manera que puedas escucharte diciendo cosas que te ayudarán a tener más valor, a tener una visión más amable de ti y a saberte valiosa.

Pero si no te sientes cómoda diciéndolas en voz alta ahora, puedes hacer el ejercicio escribiendo tus atributos, lo que te hacen única y tus elementos diferenciadores.

Y así, poco a poco, conseguirás tener el coraje para pasar del papel a la voz y pararte frente al espejo y decirlas en voz alta.

Buscar la manera de instaurar esto como un ejercicio diario en donde te repites las cosas que sí son positivas en lugar de pensar en lo que no te gustan.

Parece una tontería pero es una de las herramientas que te ayudarán a confiar y creer más en ti.

4. Toma acción

Siempre lo digo, este es el paso más importante para crear cualquier hábito.

Y no es diferente cuando se trata del hábito de tener más confianza en ti misma.

Pero, ¿cómo tomar acción?

Tomar acción se trata de hacer, todos los días, algo que te saque de tu zona de confort y que represente un reto para ti.

Por ejemplo, si eres una persona que no se siente cómoda hablando en público, es importante que hagas lo posible de poco a poco ponerte en situaciones donde tengas que hacerlo.

Por supuesto, de menos a más, no es necesario que te pongas de una vez, en frente de mil personas, a hablar en una tarima sino que poco a poco, te expongas en situaciones que te hagan ganar confianza hasta que llegues a ese punto donde puedas hacer estas cosas que antes te generaban tanta incomodidad que te negabas a hacerlo.

Por ejemplo, es una buena idea empezar con tu entorno seguro y exponer cómo te sientes, expresar tu opinión con seguridad y decir lo que realmente piensas o sientes, enfrentando el miedo a lo que los demás puedan pensar de ti.

Es algo que vas a ir construyendo poco a poco.

Pero hay que dar el primer paso e ir haciendo cosas que nos lleven a creer más en nosotros mismos, en nuestras capacidades y fortalezas.

5. Dale fuerza a tu voz interna amiga

Louise Hay, escritora estadounidense, tiene una frase que me parece que introduce perfecto este punto y es la siguiente:

“Te has criticado por años y no ha funcionado, intenta aprobarte y mira qué pasa”.

Todos tenemos una voz interna critica y una voz interna amiga pero, lamentablemente, en la mayoría de nosotros esa voz que es crítica, que siempre esta pensando en negativo, que nos resalta lo que no hacemos bien, tiene el volumen muy alto y, por eso, la voz timida de nuestra mejor amiga interna no se puede escuchar bien.

A veces, ni siquiera se escucha.

La voz critica viene de nuestros miedos, traumas e inseguridades, de todas esas cosas que nos han salido mal y que se quedan en nuestra mente, mientras que la voz amiga es la que realmente nos conoce y sabe de qué estamos hechos, es la que sabe todo lo que hemos superado y la fuerza que tenemos dentro.

Entonces, la clave de todo esto es aprender a bajarle el volumen a la voz critica y subirle el volumen a la voz que nos da coraje y fuerza.

¿Cómo vamos a hacer eso?

Cada vez que te encuentres pensando en algo negativo, por ejemplo, cuando te estás sirviendo un café y estás pensando en todo lo malo que puede pasar hoy cuando presentes ese proyecto que tienes que presentar o en cualquier situación en la que empiezas a atacarte a ti misma con ese tipo de pensamientos, interrumpe esos pensamientos consientemente y reemplazarlos con los pensamientos positivos de por qué eso va a salir bien.

“Esto va a salir bien porque me he preparado para conseguirlo”.

“He estado en situaciones similares y lo he hecho muy bien”.

“Confío en que si algo sale mal, yo voy a poder mantener la calma para encontrar una solución rápido”.

Este tipo de afirmaciones matan a esa sucesión de pensamientos negativos en el momento en el que nacen porque se basan en la realidad de tus capacidades y herramientas, a la vez que te ayudan a construir esa parte positiva de ti que ya tienes pero que parece que ahora no tienen fuerza.

Como ves, tu voz interna amiga es tu aliada para empezar a creer en ti.

6. Busca oportunidades para ayudar a otras personas

¿Y cómo me va a dar esto confianza a mí?

¿Cómo voy a aprender a creer en mí ayudando a los demás?

Cuando ayudas a otra persona que lo necesita, estás activando tu compasión, bajando tu ego y utilizando tus herramientas y tu potencial para ayudar desinteresadamente.

Este acto no solo le baja los humos al ego sino que te va a sembrar la idea de que eres capaz de generar un cambio positivo en otros.

El liderazgo no es solo estar en una posición alta en una compañía o ser el jefe de alguien, el liderazgo es también aprender a utilizar el poder que tenemos dentro de nosotros mismos para cambiar nuestro entorno.

De eso se trata ser un líder y, cuando nos vemos a nosotros mismos con esa luz de liderazgo porque estamos utilizando nuestro poder para ayudar a otros, empieza a aumentar la confianza que necesitamos para saber que somos capaces porque va a dejar en evidencia ante ti misma las habilidades y capacidades que tienes para generar un cambio.

7. Cuídate y preocuparte por ti misma

Parker Palmer dice lo siguiente:

Cuidarme nunca es un acto egoísta, es simplemente una buena administración del único regalo que tengo. El regalo por el que me pusieron en este mundo para ofrecerle a los demás.

Así que, partiendo de este principio de entender que cuidar de ti misma nunca es ser egoísta, así tengas una familia, hijos o pareja a la cual darle también tiempo y dedicación, es importante que garantices que tu bienestar esté siempre de primero porque va a ser imposible que cuides apropiadamente de los demás y, mucho menos, que tengas confianza en ti si no te sientes bien, si no estas cómoda en tu propio cuerpo, si sientes que no duermes bien, si tienes la energía baja, si no te estás nutriendo tu cuerpo o hidratándolo.

Todas estas cosas hacen no te sientas capaz porque siempre va as sentir que estás apagando fuegos, reaccionando a la situaciones y no siendo proactiva; simplemente resolviendo un problema tras otro.

Recuerda que cuidar de sí mismos se ve diferente para cada quien y eso está bien.

No caigas en la trampa de compararte con los demás o de hacer lo que los demás te dicen que debes hacer para sentirte bien.

La idea es que escuches tu interior, tu cuerpo, tus señales y sepas qué es lo importante para ti y lo atiendas.

En general, moverse un poco, nutrirse bien y tener una buena rutina de sueño es bastante importante, pero a eso se le pueden sumar otras cosas como tener mensualmente una cita entre amigas, hacerse una rutina de cuidado de la piel o del pelo, tener una cita contigo misma, practicar un hobby, hablar con las personas que te quieren, comprar flores para tu hogar, rodearte de plantas, en fin, todo aquello que te permita estar bien y tener una buena relación contigo misma.

Todas estas cosas ayudan a aumentar tu autoestima y, con ella, la confianza en ti.

8. Aprende a decir que no

“Nunca permitas que te callen. Nunca te permitas ser una víctima. No aceptes la definición de vida de nadie más que de ti mismo”.

Harvey Fierstein es el autor de esta frase tan poderosa que todos necesitamos escuchar o leer alguna vez en nuestras vidas.

Y es que aprender a decir que no es enseñarle a los demás a respetar tus barreras personales y aprender tú también a respetarlas.

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Pero antes, necesitas saber y conocer cuáles son tus límites para poder enseñarle a los demás y a ti misma a respetarlas.

Cuando te ves en una situación que te parece injusta y en la que normalmente no dirías nada, simplemente para llevar la fiesta en paz o porque crees que es mejor dar tu brazo a torcer para evitar situaciones incómodas, es importante aprender a plantar el pie y decir algo como “no me parece”, “no estoy de acuerdo”, “esto no se alinea con mis valores”, “no me veo haciendo esto porque esa no soy yo” o cualquier otra cosa que te permita poner un alto a cualquier persona o situación que te incomode.

Con esto no estoy diciendo que nos convirtamos en seres sorberbios o groseros, no se trata de eso.

Lo que sí es importante que aprendamos a decir que no porque decir que no es alzar tu voz en las situaciones en las que no estás de acuerdo y saber pedir lo que quieres.

Hay momentos en los que quisiéramos expresar una opinión, pedir algo o exigir algo que sabemos que nos merecemos y no lo hacemos porque esa inseguridad que tenemos en nosotros no nos lo permite.

Esa voz crítica está tan alta que nos hace sentir temerosos, que no nos permite apropiarnos de ese poder que se te ha sido asignado y que no estás aprovechando en este momento.

Todos tenemos ese poder dentro de nosotros y a través de ese poder es que podemos aprender a hacer valer nuestro derecho, hacer que los demás nos respeten, podemos decir lo que pensamos y exigir lo que merecemos.

Aprender a creer en ti pasa por aprender a cultivar tu fuerza interior, aprender a saber cuál es el momento de decir “basta”, de irte de un lugar o de decir lo que piensas.

Siempre con respeto pero sin acumular todo eso dentro de ti porque todo lo que se acumula, todo lo que no se dice, brota de otras maneras como estrés, ansiedad, enfermedades y de muchas otras maneras que no son las ideales para nosotros y nuestra salud.

Si sientes que necesitas ayuda para confiar en ti, que necesitas una guía que te ayude a encontrar tu voz interior a conectar con esa brújula interna, pongo a tu disposición mis programas personalizados de coaching on-line con los que he tenido el honor de acompañar a muchísimas mujeres -y hombres- como tú y como yo.

Por favor, recuerda tenerte compasión en el proceso y, sobre todo, comienza poco a poco, con lo que te vayas sintiendo cómoda.

Cada paso en importante, simplemente el hecho de querer hacer las cosas diferentes y de atreverse, cuenta mucho.

No pasa nada si un día no logras hacerlo, tienes el siguiente para intentarlo una vez más.

Lo importante es no parar de cultivar este hábito porque la confianza en sí mismo es un habito que se construye a base de acciones, palabras y pensamientos deliberados.